Una madre tóxica siempre educará a sus hijos para que atiendan a sus voluntades, o a sus órdenes. Sin cuestionarlas lo más mínimo. Es una educación basada en la culpa y en la manipulación. Por ese motivo, los hijos de madres tóxicas se convierten en personas adultas heridas. Una educación tóxica solo genera dolor y sufrimiento. Son heridas que acompañarán a las víctimas durante toda su vida, al menos que no reciban tratamiento psicológico. Así que, si has sido víctima de una educación tóxica, apuesta por la terapia. ¡Adelante!
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El texto no es horrible, sino real. Lo que resulta horrible es el resultado de una crianza tóxica, donde idealizar a la madre, ya es parte de ese resultado. No se trata de cuestionar a la madre, sino de mirarla tal y como es o fue; un ser humano que como cualquiera comete errores. Por exceso de amor, porque siguió un patrón familiar, por lo que sea no deja de ser error. El texto es alentador cuando te dice que yendo a terapia puedes sanar , puedes entender a tu madre, pero por sobretodo, conseguirás eliminar el patrón de crianza dañina, que se refleja mucho en los conflictos internos e interpersonales. Me parece excelente que la psicología haya dado las respuestas.
Nadie enseño a nuestra madre a ser madre; hizo lo que pudo con laa herramientas a su alcance. Me parece un texto horrible ; nadie es tóxico a proposito. Hoy son otras las realidades; jamás cuestionaria a mi madre; q me crio como pudo y con los valires rígidos de su época.