Dracolino, Pirindicuela o Chusco, son algunos de los personajes que nos guían en el universo de Begoña Ibarrola. El cosmos de esta experta en inteligencia emocional lo habitan dragones, hadas y animales de toda índole. Actores vergonzosos, orgullosos o solidarios que representan todo un mundo emocional y que se proponen ayudar al lector a comprender sus propias emociones. La lectura, señala la escritora, “es como un espejo donde el lector se ve reflejado y encuentra incluso solución a sus problemas”.
Begoña Ibarrola: “Las emociones son las guardianas del aprendizaje”
Muchas Gracias me interesa la propuesta.